Actualmente la humanidad está llegando a su madurez. Esto es lo que hace posible la unificación de la familia humana y la construcción de una sociedad pacífica global. Entre los principios que promueve la Fe Bahá'í como vitales para alcanzar esta meta figuran:
Bahá'u'lláh enseñó que hay un solo Dios cuyas revelaciones sucesivas de Su voluntad a la humanidad han constituido la principal fuerza civilizadora de la historia. Los agentes de este proceso han sido los Mensajeros Divinos, a quienes los hombres ven básicamente como fundadores de sistemas religiosos distintos, pero cuyo propósito común ha sido el de conducir a la raza humana a la madurez espiritual y moral.
Se entiende que el hombre ocupa un lugar especial en el mundo natural. "El cuerpo humano está, como los animales, sujeto a las leyes naturales. Pero el hombre está dotado de una segunda realidad, la realidad racional o intelectual; y la realidad intelectual del hombre predomina sobre la naturaleza"